Por Leila B. L´Anet, a cargo del área creativa de Luxury Scents (www.luxuryscents.com.ar)

Hay aromas que pueden ayudarnos a remontar un día, a concentrarnos o hasta a mejorar nuestros estados de ánimo si están muy caídos. Así, la aromaterapia se ha vuelto una herramienta indispensable para impulsar el bienestar físico y anímico.

Entre los aromas que se consideran antidepresivos están los cítricos: limón, naranja, pomelo, mandarina y lima son excelentes para ambientar espacios de descanso y también los laborales, pues aseguran que estimulan la atención. Además, le dan liviandad a los lugares.

Si lo que se busca es llevar el perfume en el cuerpo, lo ideal es recurrir a los jabones o a los sprays. En ese caso se puede recurrir al aroma de rosa, lavanda o salvia. En el caso de la lavanda, ésta es perfecta para irse a dormir, pues facilita la entrada en el sueño.

Quienes son muy ansiosos tienen una cura al alcance de la mano. Ellos pueden recurrir al aroma de la vainilla, cuya dulzura, aseguran, calma y baja el estrés. Muchos lo usan y lo llevan en situaciones que les son angustiantes, como antes de un procedimiento médico invasivo o en viajes en avión. Otro aroma que es muy efectivo contra el estrés es el cedro, que puede tenerse en pequeñas dosis de aceites esenciales en el hogar.

Para recuperarse luego de una jornada ardua y poder recompensar nuestra mente, nada como apelar a una combinación de sándalo y romero. Se los puede combinar con sales para darse un baño de inmersión. Luego, nada como apoyar la cabeza sobre un almohada aromatizada con lino o lavanda.

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